Problematica en la Universidad Argentina

Los Unos y los Otros ... Nosotros (jiwasanaka)

Por Pablo Mingote

Los Humanos solemos cruzar espadas en las que ambas partes, llamativamente, enarbolan la misma causa, a la que consideran justa y suficiente. En nuestra reciente historia los nazis, en la etapa previa a la toma total del poder en Alemania, se depuraban entre si, ambos gritando “Mein Führer”; en los setenta los jóvenes argentinos nos matábamos al grito de “Viva Perón”; en la actualidad “santos dedicados” estrellan sus aviones o bombardean contra civiles invocando una causa divina justa y suficiente. Und so weiter (etc).
Algunos pueblos indoamericanos, en este caso los aymaras, reflejan su idiosincrasia a través de su lengua. Y para el equivalente de el pronombre “nosotros”, ellos tienen: jiwasa (nosotros), jiwasaki (nosotros no más) y jiwasanaka (nosotros y todos los demás). Reflejo de esto es su manera de comportarse y resolver sus problemas en forma comunitaria, en el marco de una geografía muy demandante, lo que a su vez explicaría al mismo comportamiento.
Junto con la crisis del Capitalismo Globalizado, y su automático resultado de exclusión, subyace una crisis del Sistema Político / Económico / Social en el que la Humanidad ha evolucionado. La Conciencia, el Pensamiento y la Inteligencia han hecho que la misma Humanidad sea desde hace cuarenta mil años la rectora de su propia Evolución. Sin embargo la construcción de los valores éticos siempre ha ido por detrás de la tecnología, siendo actualmente el hiato aún más amplio. Nuestra base biológica animal determina muchas veces las decisiones que se consideran realmente por libre albedrío, pero que ocultan las viejas tendencias ancestrales como el “pertenecer a la misma manada”, desconfiar del ajeno, denostar la persona sin importar su lengua o argumentos, etc.
Sin darnos cuenta estamos siendo actores en esta Crisis, y perdimos el norte que debería estar dado por los valores éticos definidos en visión del bien del conjunto, más aún en esta etapa globalizada de la Humanidad, donde quizás está en juego incluso nuestra supervivencia como Especie. Podemos ser o no la noosfera que prevalezca en este planeta, o la Evolución de la Vida generará algún día otra diferente.
En el marco de la actual discusión en el seno de la Universidad del Comahue, parecieran existir posiciones opuestas e irreconciliables. Si uno escucha y analiza los discursos pareciera sin embargo que en el fondo se habla de lo mismo. Podría decirse que un argumento común fuera: “En defensa de la oportunidad igualitaria de acceso a la educación, sustentable y corregida de las exclusiones”.
Aquellos que desarrollamos algo relacionado con la Ciencia, podríamos llamarnos Científicos, a pesar de la acepción que se le asigna actualmente. Conformamos el sector intelectual de la Sociedad, y en cierto modo disfrutamos, aún a pesar de nuestros principios altruistas, de esta asignación. Sin embargo se ve necesario una vuelta a las bases, y convertirnos en filósofos de la Ciencia, planteando las preguntas básicas y resolviendo en un marco mas “humanizado” los problemas. En esta área, sin embargo deberemos aceptar no ser los privilegiados, y que un simple empleado de una estafeta postal pueda llegar a los niveles más altos del Raciocinio.
Si analizamos lo que el Sistema ha generado, podemos ver que entre la población que aspira a pertenecer al área de las Ciencias, están los Capacitados, los Capaces pero sin oportunidad de capacitación y aquellos Capaces que realmente han tenido la suerte de ser capacitados. De ser nuestro sistema aún mas justo, y los recursos mejor administrados y distribuídos, debería también incluirse a aquellos no tan Capaces y sin oportunidad de Capacitación.
Si logramos sentirnos corporativamente pertenecientes a la Humanidad, de reales actores de la noosfera, responsables de nuestra propia Evolución o destrucción, deberíamos apelar a un ejercicio de abandono de nuestras ambiciones personales o grupales, sean en nombre de los mas altos ideales, dogmas, ideologías, la “realidad” fáctica, etc, y dar un primer paso de entendimiento del otro para hallar lo mejor para el “nosotros” (jiwasanaka), de tal manera de poder seleccionar en forma sustentable, tutorizada e igualitaria a los Capaces, independientemente de su status económico o educacional. Está en nuestra lealtad hacia uno mismo el generar el entendimiento, los puntos comunes, las operatorias correspondientes y el consenso necesarios para superarnos.
Demostremos que una nueva y mejor Humanidad es posible comenzando desde este “pequeño” problema en el concierto global. El esfuerzo vale la pena y la Evolución de la Conciencia puede comenzar en cualquier lugar del mundo para expandirse epidémicamente al resto. Lo que esta en juego no es una rencilla acotada, sino la posibilidad de crecer como Humanos, evitando un posible destino negativo como Especie.
Pido indulgencia a los lectores, dado que los argumentos puedan dar pie a refutaciones válidas y de peso. Pero lo que realmente deseo transmitir es el espíritu que subyace a estas líneas, y que espero acceda al de todos ustedes.